Hace
pocos años nadie lo habría creído, pero hoy en día las asociaciones terraplanistas
no solamente existen, sino que además van ganando adeptos. En la página web de
la asociación americana –la original- su actual presidente (ingeniero
informático él) nos informa de que su actitud no es debida a un tema religioso,
sino que está basada en hechos constatados por la ciencia. El auge del
terraplanismo, por tanto, es un tema que tiene más que ver con la sociología y
la psicología que con la física o la astronomía. A finales de los años 1950
Jung adscribió el auge de las visiones de naves extraterrestres con un fenómeno
de psicología de masas relacionado con los mitos de salvación y de fantasía
tecnológica, independientemente del hecho de que los visionados se
correspondieran con fenómenos reales o no. En el caso presente, cualquier
persona en su sano juicio y con un mínimo de educación puede demostrar que la
esfericidad del planeta no tan solo satisface y encaja con todas las piezas del
entramado, sino que la planaridad choca con obviedades elementales. En el caso
de los ovnis el modelo de Jung remitía una visión relacionada con el futuro a
un sustrato simbólico dependiente de mitologías, es decir, de alguna manera
redibujaba proposiciones trans-racionales como realmente pre-racionales. En el
caso del terraplanismo no podemos referenciar el hecho proposicional a otra
cosa que una pura regresión. Uno de mis modelos favoritos de psicosociología
evolutiva, el de Jean Gebser, relaciona cada estadio evolutivo con la apertura
de una nueva dimensión espacial. A una etapa arcaica de dimensión cero siguen
así una etapa mágica monodimensional, una mítica bidimensional y una racional
tridimensional habiendo comenzado hace más de cien años una nueva etapa
transracional tetradimensional. La idea de ascenso dimensional se relaciona con
la apertura de nuevos órdenes cualitativos mientras que el desarrollo histórico
de cada etapa se relacionaría con exploraciones cuantitativas. La idea de
dimensión aplica tanto al simbolismo geométrico-espacial de las capacidades
cognitivas como a su utilización en artes plásticas como al desarrollo del
conocimiento físico del mundo. A la Tierra plana del mito –la Tierra que
percibimos bajo una perspectiva espacial muy corta- le sigue la Tierra
tridimensional de la razón, la que percibimos a través de una perspectiva
mental-racional. A principios del S XX la teoría de la relatividad ofrecía nada
menos que unos nuevos conceptos de espacio y de tiempo, uniendo ambos elementos
en un continuo tetradimensional del que la perspectiva tridimensional no sería
más que un corte epistemológico. Posteriores descripciones fisico-matemáticas
del mundo emplean órdenes dimensionales superiores (10 dimensiones para la
teoría de cuerdas, 11 para el modelo super-gravitatorio e incluso infinitas
dimensiones para alguna de las formulaciones de la mecánica cuántica. Después
de todo este viaje evolutivo el regresar a un mundo bi-dimensional responde a
un fenómeno preocupante que va más allá de las puras opiniones. Las creencias
son y serán siempre necesarias para poder vivir y son en buena parte
independientes de las racionalizaciones, pero existen creencias que se acercan
mucho a la línea difusa que anuncia el final de una zona digamos que “higiénica”y
el principio de una “conspiranoica”. Uno también puede creer que su madre es
una jirafa o que es capaz de volar si se lo propone, pero eso no añade
demasiado a lo que percibimos cuando alguien verbaliza un juicio de este
estilo. El terraplanismo, que no es en absoluto un movimiento nuevo, sí que
constituye, por otro lado, el último grito en cuanto a desafíos a un consenso
intersubjetivo cada vez más denostado por la post-modernidad.
2 comentarios:
Fratello,
gracias al avance tecnológico, pronto se podrán hacer viajes a la estratosfera con la misma facilidad con la que cogemos un avión. Entonces, desde esta altitud, a ver quién es el terraplanista que sigue en sus trece. Porque a esta agrupación de ignorantes es mejor tratarlos como se trató a Santo Tomás, poniendo el dedo en la llaga para creer.
Saludos,
fp
Fratello:
Me temo que el terraplanismo es una actitud que no está necesariamente ligada a la presentación de pruebas sino más bien un modo de vida regresivo y un refugio de conciencias pobremente reaccionarias.
Veurem coses grosses!
fp
Publicar un comentario