Este blog acaba de cumplir dieciséis años. Para un blog,
como para un perro, ésta es una edad considerable en la que el vigor inicial ha
disminuido irremisiblemente. Aún así, con los
mínimos que representa la publicación de un post por mes, vamos a ir tirando
hasta una possible renovación.
Mientras tanto, y con unos días de retraso, deseo lo major para este 2022 que empieza con un poco de música. Música para la alegria:
Alegría divina y un tanto teatral
Alegría terrena y un tanto literaria
Alegrìa cinètica y un tanto brusca
Alegría interior y un tanto estática
Alegría contagiosa y un tanto coqueta
Alegria de danza y un tanto urgente
Alegría frenètica y un tanto orgiàstica
Molt Bon Any per a tothom!!