La imbecilidad, cultivada de forma acelerada durante las últimas décadas, ha florecido de forma universal para gran regocijo de muchos. La presente versión de la imbecilidad, además, se inocula y reproduce de forma viral, con impresionantes crecimientos de progresión geométrica. Es difícil escapar a su contagio y hacen falta ciertas máscaras intelectuales para mantenerse en pie mientras se está sometido a su continuo bombardeo. Las máscaras intelectuales están basadas, claro está, en creencias; creencias firmes pero siempre flexibles, aunque nunca de quita y pon. Lo que está sucediendo en la geopolítica mundial no tiene otra explicación que la conjunción de la creciente debilidad moral por parte tanto de explotadores como de explotados (roles ambiguos ambos) sumada a la imbecilidad, cultivada de forma acelerada durante l ......