La interfaz de usuario es el medio con que el usuario puede comunicarse con una máquina, un equipo o una computadora, y comprende todos los puntos de contacto entre el usuario y el equipo. Esta definición de Wikipedia se puede ampliar hasta otros ámbitos de acción muy alejados del mundo de la informática. Los directores de sucursales bancarias, por ejemplo, son un buen ejemplo de ello. Las funciones que en la actualidad desempeñan de cara al público suelen ser mayoritariamente las de gestor comercial (así se los está empezando ya a denominar). Esta figura ejerce de enlace entre un mecanismo oculto y complejísimo al que ella misma tiene un acceso limitado (las decisiones estratégicas que los altos directivos toman dentro de la entidad y los grandes holdings financieros internacionales que son los que en realidad accionan los mecanismos cada vez más inciertos sobre movimientos de capitales) y el cliente. O sea, que los directores de sucursal bancaria cada vez se parecen más a los vendedores de enciclopedias a domicilio. Otro ejemplo a mayor escala de lo que podríamos llamar interfaz de usuario lo constituyen los políticos. A los políticos les sucede un poco lo que a los directores de sucursales bancarias: su ámbito de poder es limitado, especialmente cuando topan con grupos de poder a gran escala. Este caso es más trágico que el anterior, porque en una democracia el político representa al ciudadano y, por tanto, cualquier presión ó soborno ejercido sobre él por los grupos de poder significa una desconexión para con los ciudadanos a quienes representa; un mal funcionamiento de la interfaz, en suma. Según reza Wikipedia, las interfaces normalmente suelen ser fáciles de entender y fáciles de accionar (¡aquí ya aparecen las diferencias!).
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sábado, 26 de noviembre de 2011
martes, 15 de noviembre de 2011
viernes, 4 de noviembre de 2011
Límites
Los límites son a menudo las fronteras que imponemos entre categorías que nos inventamos. Dicho así suena muy fundamentalista pero si lo pensamos bien, ¿quién pone los límites y donde los establece? Pues la costumbre, el buen hacer, la moralidad imperante, la autoridad, la fuerza, las características cibernéticas del sistema, las reservas materiales ó energéticas, la capacidad, la paciencia…Los menores siempre están buscando los límites por pura necesidad, y cuando los hallan se encuentran simultáneamente con el alivio y el chasco ó el sopapo. A los adultos en ocasiones los límites les pueden sugerir algo así como falta de libertad o cortapisas. Muchos de tales límites son solamente atravesados por unos pocos exploradores que acaban llevando tras de sí a toda la manada. Sin ambargo, en esta sociedad plana y desalmada que estamos sufriendo algunos límites se van corriendo cada vez más rápidamente hacia lo que nos parece intolerable. Los bancos cada vez ofrecen menos no solo intereses sino seguridades por seguir especulando con nuestro dinero. Los servicios públicos cada vez ofrecen menos calidad porque los fondos destinados a tal empeño han sido robados por un número siempre creciente (¿sin límite?) de malhechores de guante blanco. Los daños ocasionados a la biosfera terrestre, pese a todas las buenas intenciones, siguen creciendo en progresión geométrica. Sin embargo, siempre acabamos aceptando la ampliación de tales límites. Esta vuelta de tuerca constante ¿tendrá un límite?
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